Calor y objetivos.

Llega el calor y cada vez cuesta mas salir a correr. A igualdad de distancia y ritmo, se nos hace mas duro terminar la sesión, lo dicen las sensaciones y el pulsómetro La humedad y las altas temperaturas hacen que correr ,en esta zona del sur de la península, sea un calvario, sobre todo a la hora que me es mas favorable (las 15h o 16h). Si a todo esto le sumamos la falta de objetivos a corto plazo, salir a entrenar se convierte en un sacrificio aun mayor. Lo inexplicable es que, en cuanto estoy dos dias parado, siento una gran necesidad de salir a correr, y siento envidia sana de los ultrafondistas que tienen en fechas cercanas pruebas por disputar. Cuando miro el calendario de carreras de Julio y Agosto todo me parece o lejano o caro, y me digo a mi mismo que hay que descansar, para no comerme el coco, pero no logro convencerme. Así que, aunque he dicho mil veces que este año no voy correr la Subida al Veleta, ya me ha pasado por la cabeza varias veces, por cercanía y por economía……….y por hacer algo, vaya. Lo que mas me apetece es salir a correr al monte por la noche, como estos años atrás preparando el UTMB, en buena compañía, entre risas y anécdotas, a la luz de un frontal, y recordar situaciones como “el ataque de los cerdos asesinos” una madrugada, o “la visita de los Guardia Civiles” en otra ocasión. Lo que está claro es que va a ser un verano raro, sin nada gordo que preparar, y va a ser duro para un espíritu inquieto como es el mío.